DATOS
TÉCNICOS:
Título:
EL ACCIDENTE DE LAUREN MARSH
Autor: Guillem Morales
Editorial: Plaza & Janés
ISBN: 978-84-01-02392-7
Páginas: 320
Presentación: Rústica con solapas
El pasado 18 de
febrero asistimos algunas yincaneras y yo a un encuentro en las oficinas de Penguin
Random House en Madrid con Guillem Morales, guionista, director de cine y
televisión y ahora escritor tras publicar su opera prima: El accidente de
Lauren Marsh. Actuaba como maestro de ceremonias su editor, Alberto Marcos.
Y tengo que decir que lo hizo de lujo porque la novela y todos sus vericuetos
dieron mucho de sí. Y lo que es más importante y que siempre me subyuga porque
no deja de sorprenderme: que parece mentira que una misma historia sea capaz de
generar diferentes lecturas, distintas impresiones, que lo consiguen es
ennoblecerla por todo lo que es capaz de generar.
Guillem Morales (Barcelona, 1973) es guionista y director
de cine y televisión. Fue nominado al Goya a la Mejor Dirección Novel por su
aclamada primera película, El habitante incierto. Su segundo largometraje, Los
ojos de Julia, protagonizado por Belén Rueda, fue un gran éxito de taquilla y
recibió el clamor unánime de la crítica. Tras este éxito, se mudó a Londres,
donde dirigió varios episodios de la serie Inside No.9, trabajo por el cual fue
nominado al Bafta. Ha estado a cargo de la adaptación para la BBC de la clásica
obra de Evelyn Waugh Decline & Fall, donde dirigió a Jack Whitehall y Eva
Longoria, además del éxito internacional The Miniaturist, basada en la premiada
novela de Jessie Burton. En 2018 regresó a Barcelona, donde escribió la
adaptación teatral de Frankenstein, montaje dirigido por Carme Portaceli en el
Teatre Nacional de Catalunya. Recientemente ha dirigido los tres primeros
episodios de La Templanza, la serie de Amazon Prime Video que adapta la novela
homónima de María Dueñas. El accidente de Lauren Marsh (Plaza & Janés) es
su debut como novelista.
¿Qué amenaza se cierne sobre los habitantes de la
urbanización Century Europa?
Lauren Marsh sale a
correr, como cada mañana, y cae en un socavón mal señalizado en las obras de
reforma de la urbanización Century Europa donde vive. Afortunadamente, la mujer
no sufre heridas mortales, pero Cédric, el inspector de seguros encargado de la
investigación, descubre indicios de que el accidente no ha sido fortuito. A
partir de ese momento, se verán envueltos en una trama de misterio donde nada
es lo que parece: sucesos sangrientos, vecinos que guardan secretos y una
verdad oculta de la que es imposible salir indemne. Los accidentes en Century
Europa no han hecho más que empezar...
El accidente de
Lauren Marsh, la primera novela del director de cine y guionista Guillem
Morales, es una reflexión sobre la soledad, la culpa y el aislamiento en una
gran ciudad, con la forma de un original y demoledor thriller de ritmo
absorbente, trama retorcida y un final sorprendente incluso para los lectores
más avezados.
«La gente suele
correr para huir de un peligro. Lauren, en cambio, corría para caer en uno.»
Así comienza El accidente de Lauren Marsh, la
primera novela del guionista y director de cine y televisión Guillem Morales. Y
es toda una declaración de intenciones, porque, en este thriller psicológico,
no vamos a encontrar un asesinato, pero sí acción y tensión a raudales, aunque
con matices, porque si hay algo que caracteriza a esta novela es que es, por
encima de todo, insólita, por todo lo que tiene de atípica y original.
¿Es esto un problema? No. O puede que sí, en el caso de que seas de aquellos lectores con prejuicios, de los que solo entienden el thriller en base a sus temáticas más comunes: asesinatos, desapariciones, secuestros, conspiraciones políticas, etc. o porque su protagonista sea un tipo aguerrido, experimentado y acostumbrado al peligro, capaz de enfrentarse a un antagonista a la altura.
¿Es esto un problema? No. O puede que sí, en el caso de que seas de aquellos lectores con prejuicios, de los que solo entienden el thriller en base a sus temáticas más comunes: asesinatos, desapariciones, secuestros, conspiraciones políticas, etc. o porque su protagonista sea un tipo aguerrido, experimentado y acostumbrado al peligro, capaz de enfrentarse a un antagonista a la altura.
Porque El accidente de Lauren Marsh, tanto en los
referente a temática como a personajes es todo lo contrario y, sin embargo,
fascinante. Está estructurado de manera clásica, en la que en un principio
aparecen los protagonistas y el conflicto principal para, seguidamente, llegar
al nudo en el que se suceden la mayor parte de las situaciones y de ese modo rematar
en un desenlace en el que no solo se resuelven todos los conflictos planteados,
sino que el giro final deja boquiabierto, como poco, al lector más avezado, a
lo largo de veintiún capítulos cuyos títulos son un anticipo de lo que nos
encontraremos en cada uno. Finaliza con los típicos agradecimientos.
Todo gira, como
bien dice el título de la novela, en torno a un accidente: el de Lauren Marsh y
a dilucidar las causas que lo provocaron.
Lauren Marsh, de
nacionalidad inglesa, es ingeniera técnica industrial. Tiene treinta y siete
años y es una apasionada del deporte; de hecho, sale a correr tres días por
semana, a las cinco y media de la mañana. Es una rutina que mantiene desde hace cuatro años y nada ni nadie ha
podido cambiarla. De hecho, hace uno ocurrió un suceso en su vida que la puso
del revés, que acabó con todas sus esperanzas y, ni por esas, ha dejado de
hacerlo. Quizás porque eso la ayuda a no tirar la toalla sobre lo que aquello
supuso en su fuero interno.
El accidente tuvo lugar
en Century Europa, una urbanización situada a las afueras de Bruselas, en una
de las calles más deshabitadas de la urbanización, que se encontraba en obras
para modernizar las fosas sépticas de uno de los edificios, por lo que el
asfalto estaba levantado como consecuencia de las excavaciones que se estaban
realizando. El proyecto corría a cargo de la empresa Urbanis, que había reutilizado
la antigua fosa para volcar en ella desperdicios como los bloques de cemento agrietados
o quebrados, cristales rotos o cualquier tipo de material de desecho. Y Lauren
ha caído en ella accidentalmente, quizás debido a una escasa señalización o a
la falta de luz, dado que la única farola que alumbraba el lugar estaba
fundida. El resultado ha sido un tremendo susto y una pierna rota.
Será Cédric Dereumaux, perito de la Agencia de Seguros Carlson & Vaughin, el encargado de tasar las pérdidas y la investigación judicial del siniestro. Es su primer día de trabajo, ya que acaba de incorporarse después de una larga baja por enfermedad que ha durado más de un año. Tras personarse en el lugar de los hechos, comprueba que las barreras de seguridad no estaban puestas en el momento del accidente, aunque el jefe de obra, Alain Courbet, niega tal circunstancia. No obstante, las circunstancias personales del alarife no hacen que su testimonio sea muy creíble porque Cédric encuentra alguna que otra contradicción.
Será Cédric Dereumaux, perito de la Agencia de Seguros Carlson & Vaughin, el encargado de tasar las pérdidas y la investigación judicial del siniestro. Es su primer día de trabajo, ya que acaba de incorporarse después de una larga baja por enfermedad que ha durado más de un año. Tras personarse en el lugar de los hechos, comprueba que las barreras de seguridad no estaban puestas en el momento del accidente, aunque el jefe de obra, Alain Courbet, niega tal circunstancia. No obstante, las circunstancias personales del alarife no hacen que su testimonio sea muy creíble porque Cédric encuentra alguna que otra contradicción.
A continuación se
entrevista con la señora Sanders, una abogada internacional que se encontraba
trabajando a esas horas de la madrugada y pudo ver cómo Lauren caía al socavón
y corrió a ayudarla. Fue ella quien llamó a los paramédicos y de su testimonio
Cédric puede corroborar que las barreras se habían movido intencionadamente.
Aunque será la
declaración de la propia Lauren la que le haga replantearse todo, la que ponga
en el disparadero su intuición y le lleve a buscar indicios, porque ha visto un
destello de pánico en los ojos de la mujer y entiende que está en peligro.
Tendrá que demostrarlo. Y se emplea a fondo.
Y es que El accidente del Lauren Marsh es una
historia perturbadora. Desde las primeras páginas se respira una atmósfera inquietante,
provocada por dos de los pilares sobre los que se sostiene la novela: la ambientación y los personajes.
Para crear esa
pátina de intranquilidad, Guillem Morales nos traslada a una urbanización a las
afueras de Bruselas, posiblemente una de las ciudades más cosmopolitas y
multiculturales de Europa, porque no en vano es el epicentro político de Europa.
El proyecto megalómano de Thèodore Dubois, un prócer de los negocios con más
ambición que juicio, que decidió construir un macrocomplejo residencial y exclusivo allá por
la década de los setenta para pasar casi desapercibido en la de los noventa, a
pesar de los esfuerzos de su creador por hacerlo crecer sin medida. En la
actualidad se ha convertido en poco más que una ciudad fantasma en la que las
averías y los desperfectos son el pan nuestro de cada día con las que tiene que
lidia el equipo de mantenimiento, que no tiene presupuesto para tanto exceso y
eso afecta, sobre manera, en el día a día de sus habitantes, que han empezado a
denunciar al grupo empresarial propietario de la urbanización, que se encuentra
en estado ruinoso, por incumplimiento de contrato.
En el capítulo de
los personajes, los ha bordado. No quiero desvelar mucho de ellos, porque es
uno de los platos fuertes de la historia, por la cantidad de sensaciones que
han sido capaz de generarme, por la intrincada historia que sobrellevan, por el
modo en que se enfrentan a sus demonios personales y como los conjuran. Porque
el accidente padecido por Lauren Marsh es solo uno más entre otros muchos que han
sufrido otros habitantes de la misma urbanización.
Y, con esos
mimbres, Cédric va resolviendo un crucigrama blanco imposible, donde otros han
elegido el tamaño de la cuadrícula y las pistas de las definiciones son un
tanto engañosas. Hasta que empieza a tomarle la medida y va descubriendo las
casillas negras. Claro que el camino es tortuoso, porque las palabras “expiación”
y “accidente” aparecen en la primera línea horizontal y, desde ahí, se le
antojan una inmensidad de sinónimos para concretar otras muchas, como “fantasmas”,
“soledad” o “clandestinidad” y “culpa”, continuamente, en todas sus acepciones.
El accidente de Lauren Marsh ha sido una
lectura francamente interesante. La intriga se plantea en las primeras páginas
y la tensión va en aumento, a medida que avanzas, de forma exponencial. Escrito
con un estilo muy cinematográfico (no podía ser de otra manera) y una prosa
sencilla y cuidada. El final es espectacular. El único posible. Un broche de
oro para una ópera prima notable.
Una reseña muy completa, con la dificultad añadida de hacerla sin desvelar la trama. Como a ti, me ha gustado mucho la novela, sobre todo por su originalidad. Un beso
ResponderEliminarVale, ahora me va a dar vergüenza publicar la mía, monstrua que eres una monstrua. A ver si aprendo de tí a reseñar este género en condiciones, porque es muy difícil hacerlo como tú lo haces, diciendo lo necesario sin decir de más
ResponderEliminarVaya reseñón! Cómo para no querer leer la novela...
ResponderEliminarBesotes!!!
Pues nada en breve me pongo con su lectura a ver si la disfruto tanto como tú.
ResponderEliminarLo de perturbadora no me gusta mucho pero todo lo demás de la ambientación y los personajes si, gracias por la reseña.
ResponderEliminarBesos
¡Hola! ^^
ResponderEliminarQue bien que lo hayas disfrutado tanto, pero a mi este libro no me atrae demasiado. No creo que sea de mi estilo
Besos!
Aunque no te lo creas, nunca he leído un thriller psicológico y no sé si me gustaría, aunque me llama la atención que el escritor sea guionista y director de cine, así que a lo mejor sí que pruebo.
ResponderEliminarBicos!
Veo que tus reseñas siguen siendo igual de impresionantes que siempre. Respecto al libro, que esté estructurado a la manera clásica y que el final sea de los que te dejan boquiabierto ya me ha ganado, jajaja... ¡Felices lecturas en estos inciertos días! :)
ResponderEliminarMe llama todo lo que cuentas así que me lo llevo apuntado, la verdad es que ni había oído hablar del libro. Estupenda reseña. Besinos.
ResponderEliminar¡Hola!
ResponderEliminarLo primero que diré será: ¿por qué no conocía yo este libro? Es que tiene todo lo que busco en este tipo de lectura. Me lo llevo apuntando para darle una oportunidad.
Besos^^
¡Hola!
ResponderEliminarLlevo apuntado este título desde hace días y ahora que leí tu reseña tan completa, definitivamente voy a leerlo ;)
¡Gracias por reseñarlo!
Nos leemos, ya me tienes de seguidora como Marianna 2.0.
Besos.
Mira que me has hablado de la novela y ya sabes que estoy muy liada con la formación online, y de momento tras leer esta reseña se me ha metido entre los ojos y se que la voy a leer mas pronto que tarde, deberías estar prohibídisima hija. Un thriller con mucha acción, sin muertos, y con un giro final sorprendente? Voyyyyyy
ResponderEliminarUna gran reseña en la que no descubres nada a quien no la haya leído y en la que cuentas todo para quienes si lo hemos hecho. Sorprendente esta novela y perfecto su final. Brsos
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