DATOS PRÁCTICOS:
Título: EL PACIENTE
Autor: Juan Gómez-Jurado
Editorial: Planeta
ISBN: 978-84-08-12291-3
Páginas: 480
Colección: Autores Españoles e Iberoamericanos
Presentación: Tapa dura con sobrecubierta
Hace tiempo que quería
conocer a Juan Gómez-Jurado literariamente hablando. Tenía mis recelos, porque
cuando te hablan tanto y tan bien de alguien, temía que tan altas expectativas
dieran paso a la decepción. Eso y que cuando me da por un autor se me llevan
los demonios si no puedo conseguir todas sus novelas.
El caso es que hace unos
días leí una reseña publicada por Carmina en su blog De tinta en vena (del que
siempre digo que debería estar prohibido porque recomendación que hace,
recomendación en la que caigo de cabeza) y me desarmó. Así que aquí me tenéis,
compartiendo impresiones.
EL AUTOR:
Juan Gómez-Jurado (Madrid, 1977). Licenciado en
Ciencias de la Información por la Universidad San Pablo CEU, ha ejercido como
periodista en distintas redacciones (Canal Plus, Televisión Española, Cadena
Ser o el diario ABC). También es colaborador en distintas revistas, radio y
televisión.
Como escritor, ha publicado tanto literatura infantil
o juvenil (Otras voces, en Alfaguara) como no ficción (La masacre de Virginia
Tech, Anatomía de una mente torturada) pero por lo que sin duda es más conocido
y con lo que recibido numerosos premios ha sido por las siguientes novelas:
- Espía de Dios (Roca Editorial,
006)
- Contrato con Dios (Plaza &
Janés, 2007)
- El emblema del traidor (Plaza
& Janés, 2008)
- La leyenda del ladrón (Planeta,
2012)
- El paciente (Planeta, 2014)
ARGUMENTO:
David Evans, viudo y padre de una niña de siete años, es uno
de los neurocirujanos más acreditados de los Estados Unidos. Pero se encuentra
ante una encrucijada: su hija ha sido secuestra por un psicópata y el rescate
solicitado no es otro que matar en la mesa de operaciones a su próximo paciente:
el presidente de EEUU. En caso contrario, será la niña quien corra esa suerte.
Todo esto ocurrió año y medio antes, cuando poco antes de
terminar su jornada laboral, el Dr. Evans atiende a un muchacho que ingresa por
urgencias en la elitista clínica de Washington en la que trabaja, derivado por
otro hospital. El muchacho es un pandillero menor de edad que ha sido herido de
gravedad en una trifulca callejera y el doctor decide operar de inmediato so
pena de que quede paralítico. Pero antes de entrar en quirófano llama a Julia,
su hija, para informar de que se retrasará más de la cuenta.
Cuando regresa a su casa descubre, con estupor, que ni la
niña ni su cuidadora están allí. Intenta llamar a la policía, pero no consigue
comunicar con ellos. Recuerda entonces una discusión que mantuvo con su suegro
en la que éste le propuso que Julia se fuese a vivir con ellos, dado que él
apenas tenía tiempo para dedicarle por tener un trabajo muy absorbente. Así
que, preso de un ataque de nervios, se marchó hasta la casa de sus suegros para
comprobarlo. Pero la niña no estaba allí y en ese momento empiezan a llegarle
mensajes a su teléfono, cada uno más enigmático y desesperante que el anterior.
Hasta que el dueño de las misivas que atiende al nombre de White, le cita en un
bar cercano a su domicilio y le hace su propuesta: dentro de tres días tendrá
que operar al presidente de los Estados Unidos, ya que tiene un tumor cerebral
bastante grave él tiene que ocuparse de que no salga vivo del quirófano. De no
ser así, no volverá a ver a su hija, que se encuentra atrapada en un zulo.
La cuenta atrás ha comenzado y David Evans se convertirá en
una marioneta en manos de un psicópata.
IMPRESIONES:
Durante
sesenta y tres largas horas, Juan Gómez-Jurado a través de David (Dave) Evans
no nos da tregua y nos lleva por el camino de la amargura con un thriller
impactante que no podrás dejar de leer.
Comienza
la acción desde el corredor de la muerte, donde el protagonista nos pone en
antecedentes y nos cuenta la historia vivida año y medio antes, cuando un
psicópata y sus secuaces secuestraron a su hija y le plantearon como rescate el
más cruel de los dilemas: acabar con la vida del presidente de los Estados
Unidos tres días después tras ser intervenido por él de un tumor cerebral en
estado avanzado. En caso de no materializarse, será su hija quien pague las
consecuencias.
Y
claro, Evans además no podrá ponerse en contacto con la policía; de hecho, con
nadie, pues White (así es como se hace llamar el sádico que ha organizado el
rapto de la niña y puesto en marcha la maquinaria), no sólo ha estudiado
previamente sus patrones de conducta, sino que conoce su entorno y le acecha
día y noche, desde un dispositivo de su teléfono móvil que está obligado a
llevar prácticamente todo el día.
Sólo puede
contar con la ayuda de una persona: su cuñada, que trabaja como agente del
servicio secreto de la casa blanca y que se volcará durante las pocas horas que
tiene para dar con la niña y ponerla a salvo.
El punto de
partida es el mejor de los posibles: es el propio protagonista el que nos relata
su historia, ocurrida año y medio antes desde el corredor de la muerte, por lo
que damos por hecho que algún jurado le ha declarado culpable, no sabemos si
por el asesinato en sí o por haber participado en la trama (y sabiendo cómo son
los americanos para estas cosas, puede ser por cualquier cosa). Y la duda es
más lacerante todavía si pensamos qué ha podido ser de la pequeña, porque la
incertidumbre nos corroe.
Pero claro,
teniendo clara la manera en que Gómez-Jurado es capaz de mover los hilos, la intriga
está asegurada, pues comienza de una manera enérgica y conmovedora que no baja
en intensidad en ningún momento. Es un relato en primera persona con continuos guiños al lector y escasos
momentos en tercera que corresponden a momentos en los que el protagonista no
forma parte de la acción y que reconocemos por estar escritos en cursiva), con
un hilo argumental perfecto, una lectura muy amena y un ritmo endiablado.
Los personajes y los temas de fondo:
En El
Paciente encontraremos un gran elenco de personajes, muy definidos y
caracterizados tanto en lo físico como en lo psicológico, no sólo a nivel de
importancia en la trama, sino que podría decirse que los secundarios son de
lujo y nos ayudan con su presencia a entender los temas de fondo que se dan
cita en esta novela, porque son muy humanos y resulta muy fácil empatizar con los
buenos y despreciar a los peores.
Así, en
primer lugar nos encontraríamos con el protagonista y su entorno familiar:
David Evans: Neurocirujano de reconocido
prestigio a nivel internacional, trabaja en el elitista hospital Sant Claire de
Washington. Padre de una niña de siete años, Julia, a sus
treinta y ocho años se ha convertido en un viudo prematuro, ya que ha perdido a
su esposa hace unos meses.
Kate Robson: Cuñada de David Evans, es la
hermana pequeña de su esposa, aunque todo lo contrario a ella en cuanto a carácter.
Muy responsable y eficaz, trabaja como agente del servicio secreto y se encarga
de la protección de la Primera Dama. Al igual que sus padres, desde la muerte
de Rachel la relación con Evans se ha enfriado bastante y apenas tienen
contacto.
A través de Kate
conoceremos los entresijos de la Casa Blanca y a sus moradores –en particular a
la Primera Dama y al presidente- y cómo funciona el Servicio Secreto. Todo un
mundo en el que se agradece lo fascinante que ha debido resultar la labor de
documentación.
Pero hay tres
grandes ausencias en la vida de Evans que le marcan como un hierro candente,
cada una relevante en un momento vital determinado:
Julia: Hija de David Evans, de siete
años, secuestrada en el momento en que comienza la acción. A menudo en sus
reflexiones Evans nos transcribe algunos de los impagables diálogos que
mantienen tiempo atrás, de los que deducimos una inteligencia y una
sensibilidad increíble. Cuando el psicópata que la tiene retenida muestra
imágenes a su padre, entendemos que su instinto de supervivencia es más que
notable.
Rachel Robson: Esposa de David Evans y madre de
Julia, su carácter era dulce y sereno. Murió meses antes de comenzar la acción.
Trabajaba en el mismo hospital que su marido como anestesista. Se suicidó tras
conocer los resultados de unas pruebas que se hizo a espaldas de su marido, en
la que le detectaron un tumor cerebral en estado muy avanzado para no tener que
hacer pasar a su familia la fase más dolorosa de la enfermedad.
Roger Evans: Padre adoptivo de David Evans. Médico
de familia, fue un hombre entrañable y tolerante que junto con su esposa supo
encauzar el cariño que el niño precisaba y le orientó en el momento preciso para
que se pudiese dedicar a lo que realmente la apasionaba: la medicina.
Tanto en el
caso de la niña como el del padre adoptivo de Evans, cada uno a su modo, dan
pie a abordar distintos temas que se plantean en la novela. En el caso de
Julia, me ha sorprendido la intensidad con la que se refleja el amor filial. David
Evans adora a su hija, quizás porque ve en ella la proyección de lo que él
siempre añoró en su infancia y más tras la muerte de su esposa, que a ambos ha
sumido en la tristeza. Para colmo, su vida se ha trastocado desde que el Sr. White
ha entrado en su vida y enfrentado a un dilema insoportable. En el caso de su
padre, nos permite meditar sobre la adopción y todo lo que conlleva. Evans fue
un niño adoptado, pero hasta que encontró a la pareja que le dieron su
apellido, lo pasó francamente mal en las casas de acogida en donde estuvo. Eso
cambió su carácter y gracias a este matrimonio y a lo bien que lo supieron
hacer con el chaval, encauzando su educación con cariño y atención, lograron
convertirle en el hombre íntegro con el que nos encontramos al principio de la
acción.
En el entorno
profesional de David Evans, nos toparemos con Stephanie Wong, su jefa
directa, fiel al sistema que mejor funciona en la clínica y con la que Evans
tiene serios problemas al tener unos principios que le llevan a ayudar a quienes
no teniendo ingresos, necesitan sus cuidados pero que no se compaginan con la
política del centro. Otro que tal baila es Robert Meyer, director del
hospital aunque no tenga idea de medicina ni de nada que se le parezca.
Proviene del mundo del márketing y sólo le importa la buena imagen del centro y
su boyante cuenta de resultados. Por ello, no es de extrañar una escena que se
da al principio de la novela, en la que un joven pandillero de quince años
llega al hospital derivado de otro público que no puede atenderle. Como
consecuencia de una pelea callejera, Jamaal Carter resulta herido de
gravedad y mientras la Dra. Wong pretende estabilizarle sin más para mandarle a
otro a la menor ocasión, el Dr. Evans decide operarle contra la voluntad de su
jefa, ya que de otro modo quedaría postrado en una silla de ruedas. Por si sus
problemas fueran pocos en el ámbito profesional, sus compañeros le han dado la
espalda desde la muerte de su esposa, ya que su carácter –habitualmente simpático
y gracioso- se ha tornado más agriado. También ha vuelto a aparecer en su vida
Alvin Hockstteter, su mentor en la época en que hacía sus prácticas como
residente. Se trata de un hombre encumbrado y sin escrúpulos con el que tuvo
roces en el pasado y al que ahora le surgen celos profesionales al ver que
Evans es el favorito de la Casa Blanca para operar al presidente.
ENLACES DE INTERÉS:
Web oficial del autor
Facebook del autor
Twitter del autor
CONCLUSIONES:
Si buscas una lectura entretenida, con la que evadirte por unas horas de
la burda realidad, te aconsejo que la leas. En ella encontrarás intriga,
sentimientos a flor de piel y unos personajes en eterno conflicto personal a
cual más interesante. ¿Que te han contado que es un best-sellers? Pues si, lo
es, pero ¿acaso eso importa?
Leí la reseña de Carmina y ya me puso los dientes largos. Ahora con la tuya, me llegan al suelo. Me parece una trama apasionante, de esas que dejan sin respiración. Ya me po pasarás, si es posible.
ResponderEliminarUn besazo, guapa mía.
Una gran novela que, no me cabe duda, se va a encontrar entre mis mejores lecturas de este año. Besos
ResponderEliminarNo es muy de mi estilo, por el momento lo dejo pasar.
ResponderEliminarEste libro lo voy a leer sí o sí pero aún tendrá que esperar un poco. Besos.
ResponderEliminarEl otro día, en la librería lo tuve en mis manos, finalmente no me decidí a comprarlo, pero veo que voy a tener que pasarme sin falta, después de leer tu reseña no me queda ninguna otra opción.
ResponderEliminarBesos.
A este libro ya le tenía ganas y ahora con tu reseña más. Pero tendrá que esperar todavía un poquito, que son tantos los pendientes....
ResponderEliminarBesotes!!!
la gente habla muy bien de este libro, tu ya, lo acabas de consagrar, a la lista de pendientes , besotes
ResponderEliminarNo, no importa. Porque es un best seller de alta calidad que no dudo en recomendar
ResponderEliminarNo me da reparo leer best-sellers. Este en concreto ya me llamó la atención antes de que fuese un éxito de ventas. Me alegro de que esté gustando tanto.
ResponderEliminarBesos
Que razón llevas en que Carmina siempre nos engancha con tus reseñas, pero que decir de las tuyas que tanto echábamos de menos...como me alegro de leerlas, y como me alegro de comprobar que esta novela te ha gustado tanto. Siempre digo lo mismo, la tengo apuntada desde que salío, pero me falta tiempo para hacerle hueco. Parece que las cosas si no las haces en su momento pasan.
ResponderEliminarUn abrazo.
Un libro que merecerá la pena leer.Seguro. Y las dudas, si las hubiera, se disipan nada más que con la reseña que nos traes.
ResponderEliminarUn saludo.
No es mucho mi género pero es verdad que junto con tu reseña el de Carmina ya había despertado mi curiosidad por el autor y por su obra. Lo tendré en cuenta.
ResponderEliminarUn saludo.
No he leído nada aún del autor y aunque tengo un libro suyo esperando en la estantería esta me atrae mucho por todas las reseñas que he visto. Si es best seller o no es lo de menos, no me importa si el libro me entretiene
ResponderEliminarBesos
Pues no, no importa, si es un best seller es porque a mucha gente le gusta y eso es lo que quisiera cualquier escritor. A mí Jurado me gustó mucho en La leyenda del ladrón, tenía ganas de este nuevo porque tiene muy buenas reseñas pero algunas hablan de un final tramposo y me hace recelar. No sé qué haré porque en lo demás coincidís todos, el ritmo, la trama y el tono son los apropiados. Sí, es muy habitual que el jefe del hospital no sepa medicina, así nos va.
ResponderEliminarBesos
Bueno lo veo por todas partes últimamente!!!
ResponderEliminarBesotes
Al final me estrenaré con el autor con todos sus novelas de golpe,
ResponderEliminarbesucus
Pues según lo cuentas el libro tiene una pinta estupenda. Lo apuntaré en mi lista de pendientes. Besos
ResponderEliminarMe encantan tus reseñas Kayena así que no te quejes de Carmina que sois las dos tal para cual, jajajaja.
ResponderEliminarTengo requeteapuntado este libro. Tengo necesidad de un hueco :)
Muchos besos.
Veo que tiene muy buenas críticas esta novela de Gómez-Jurado, autor con el que todavía no me estrené, aunque este año me leeré El emblema del traidor, que es la que tengo escrita por él. El título lo tengo más que apuntado. Besos.
ResponderEliminarTodo son reseñas positivas, por algo será. Tendré que hacerle hueco a El paciente, aunque el libro tendrá que ser paciente conmigo, pues tengo varios que llevan a la cola mucho tiempo. 1beso!
ResponderEliminarLeo de manera sesgada tu completa reseña porque quiero leerlo después de las buenas impresiones que parece que genera este libro. Besos.
ResponderEliminarQue ganas de leerlo!
ResponderEliminarLa tengo entre mis futuras lecturas. Me alegro que te hay gustado.
ResponderEliminarAl final los bestsellers lo son por algo, si no tuviera algo que atrape al lector no lo serían.
ResponderEliminarA mi que sea un best-seller no me importa, de hecho me encantan los best-sellers y muchas veces es lo que más leo porque los ves por todos los lados y es imposible no buscarlos. Con este libro me ha pasado eso precisamente, que lo estoy viendo reseñado en la blogosfera y todos coincidís en lo bueno que es, así que me ha faltado tiempo para comprarlo. Ahora está a la espera de turno. A ver si me gusta tanto como a ti, Kayena.
ResponderEliminarBesos
Bestseller o no, a mí me gustó mucho y me pareció un thriller muy adictivo, que al fin y al cabo es lo que busco muchas veces. Repetiré con el autor. Un beso
ResponderEliminarLo tengo en el kindle esperándome impaciente
ResponderEliminarBesos
Qué buenas reseñas tiene, lo tengo que leer YA! :-) Un beso !
ResponderEliminarTengo clarísimo que tengo que probar con este autor, no sé con cuál de sus novelas, pero lo haré tarde o temprano.
ResponderEliminarBesos.
Mi madre está como loca con esta novela...y con una reseña así la pienso leer!
ResponderEliminarUn beso!