LA COSECHA HUMANA, de Emilio Calderón

DATOS TÉCNICOS: 

Título: LA COSECHA HUMANA

Autor:  Emilio Calderón

Editorial: Planeta

Colección: Autores Españoles e Iberoamericanos

ISBN: 978-84-08-00952-8

Páginas: 320

Presentación: Rústica con solapas

Cuando leí la sinopsis de esta novela, supe que me iba a gustar. En la misma se hablaba de un triple asesinato y una trama de lo más siniestra donde la acción estaba asegurada. Todo ello desarrollado en una ciudad tan antigua como emblemática: Jerusalén. ¿Quién se puede resistir a un thriller de semejante factura? Yo no…

EL AUTOR:

En la solapa del libro encontramos la siguiente información sobre el autor:

Emilio Calderón (Málaga, 1960) es historiador, editor y escritor. Durante diez años se dedicó exclusivamente a la literatura infantil y juvenil. Su primera novela para adultos, El mapa del creador, fue editada en 2006 y ha sido publicada en veintitrés países. En septiembrede 2007 publicó El secreto de la porcelana y en junio de 2008, El judío de Shanghai (Premio Fernando Lara), que ya se ha traducido al inglés y cuyos derechos se han vendido también en Alemania, Holanda, Croacia, Rumanía y Ucrania. Su novela La bailarina y el inglés fue finalista del Premio Planeta 2009. Con su última obra, Los sauces de Hiroshima, publicada en 2011, Calderón cierra su llamada «trilogía asiática».

La narrativa de Emilio Calderón ha recibido críticas excepcionales en todo el mundo: «Tiene mucho que decir y lo dice bien», The New York Times (Estados Unidos); ofrece «momentos de reflexión», Financial Times (Reino Unido); cuenta con «una imaginación extraordinaria», The Sunday Business Post (Reino Unido), y compone «obras que se disfrutan de principio a fin», The Bookseller (Reino Unido).

ARGUMENTO:

Cuando aparece en un descampado próximo al Monte de los Olivos, en Jerusalén Este, el cadáver de una mujer con signos evidentes de haber sido lapidada, Sarah Toledano, inspectora de homicidios en el departamento de policía de Jerusalén, es la encargada de investigar este terrible crimen, junto con su ayudante Lautaro Heller. Pero la cosa no acaba ahí, pues días después aparecen dos cadáveres más; uno de ellos es el de un periodista de investigación, cuyo cuerpo ha sido abandonado a las puertas de un hospital mostrando heridas de arma blanca tanto en el tórax como en el vientre y el otro, encontrado en un parque, es un hombre de procedencia rusa al que le han extirpado las córneas y un riñón.

Los tres asesinatos parecen tener un denominador común, pues la joven y el periodista mantenían una relación sentimental y él, a su vez, investigaba un caso de trasplante ilegal de órganos.

Se inician entonces unas pesquisas harto complicadas, en las que los policías se verán inmersos en un bucle de conspiraciones y maniobras imposibles de esclarecer.

IMPRESIONES:

La primera sensación que recibes cuando comienzas a leer las primeras páginas de esta novela es la de que nos enfrentamos a un relato intenso y dinámico en el horizonte de los hechos. Estos se nos presentan a bocajarro: cuando el sargento Lautaro Heller despierta a su superiora, la inspectora Toledano de una pesadilla en la que su pasado reciente parece querer hacer un ajuste de cuentas con ella, para informarle del descubrimiento de un cadáver en una de las zonas más conflictivas de la ciudad. Después, todo va in crescendo, porque las intrigas y los sucesivos giros argumentales se conjugan en un ejercicio diabólico que parece no tener fin. Obviamente, el escenario es un campo de minas: Jerusalén y el conflicto palestino-israelí donde el autor nos traslada a una realidad complicada en la que en principio parece decantarse hacia el lado pro-palestino, pero que a medida que nos sumergimos en la trama, observamos que lo que Emilio Calderón pretende es ofrecernos un relato fidedigno sobre el origen y desarrollo del enfrentamiento y las claves para un futuro entendimiento donde la mujer jugaría una baza fundamental.

Por otro lado, el tema subyacente es el del tráfico ilegal de órganos. Lo más curioso es que en este asunto no hay ficción, sino que el autor se ha basado en hechos reales, haciéndose eco de un artículo publicado hace un tiempo en la prensa noruega que causó un contratiempo diplomático entre los gobiernos de ambos países. En el mismo se aseguraba que cuando el ejército israelí mataba a un palestino, inmediatamente se llevaban el cadáver para hacerle la autopsia; cuando se lo devolvían a sus familiares, éstos aseguraban que le habían realizado una costura que llegaba desde los pies hasta la cabeza. La duda queda en el aire ¿para qué vas a practicar una la autopsia a un cadáver del que sabes por qué ha muerto y cómo ha sido?. Pues bien, si esto os parece duro, no os imagináis como se puede complicar todavía más: el título de la novela es una buena pista.

Una vez aclarado el momento y el lugar, me gustaría hablar de la novela como tal y ubicarla en cierto modo, algo que no es fácil porque hoy en día parece imperar la costumbre de sincronizar varios géneros en una misma novela y La cosecha humana es un claro ejemplo de ello. Obviamente, podría clasificarse como novela negra, pero también como thriller, algo que, por otro lado, es absolutamente compatible. Y como buena novela de suspense, el elegante estilo del autor se presta a ello, utilizando un lenguaje preciso y realista, con unas dilatadas descripciones de los escenarios, una trama compleja, perfectamente trazada, a la que no se le puede poner un “pero” y unos personajes que destacan por la profundidad psicológica de sus caracteres, que no te dejarán indiferentes, ya que por sí solos, son los grandes  y auténticos bastiones de la narración:

Los personajes:

Si hay una protagonista clara, ésta es Sarah Toledano, con sus luces y sus sombras, sus fobias y sus filias:

En las primeras páginas, a través de una entrevista que le realizan a la inspectora Sarah Toledano para una emisora de radio, conocemos sus orígenes, pues más allá de querer ser conocida como la primera mujer judía de origen español que ha alcanzado un puesto de responsabilidad en Israel, al haberse convertido en inspectora de homicidios del departamento de policía de Jerusalén, desea matizar que, aunque nacida en España, lo es por una cuestión accidental. Sus abuelos paternos fueron la última generación de judíos sefardíes que vivieron en Marruecos hasta la independencia del país en 1956 (país al que previamente viajaron sus antecesores, junto con el contingente de expulsados de España por los Reyes Católicos en 1492). Y precisamente, tras la independencia de Marruecos, la inmensa mayoría de sefardíes decidió volver a Israel, recalando en España al pertenecer las ciudades de origen al protectorado español. Pero la abuela de Sarah estaba embarazada y su estado –bastante avanzado-no le permitía proseguir el viaje, por lo que se quedaron en Algeciras, en principio hasta que las condiciones físicas de ella lo permitiesen, aunque al final el deseo de volver a la Tierra Prometida siempre acababa por posponerse por alguna razón.

Una década después de su nacimiento, murió el padre de Sarah en un accidente de tráfico. Su madre era española y aunque en ese momento él se encontraba haciendo los trámites pertinentes para emprender el viaje, éste se truncó definitivamente al no encontrar la mujer el estímulo necesario para intentarlo. Pero ella nunca desoyó el deseo paterno y dadas las pésimas condiciones laborales existentes en el Campo de Gibraltar, a lo que se unía un tremendo desengaño amoroso, decidió materializar el anhelo paterno, aunque nunca imaginó el tortuoso itinerario que habría que recorrer para llegar a su situación actual.

Lautaro Heller, sargento de policía, trabaja a las órdenes de Sarah Toledano. Es judío argentino, o lo que es lo mismo: judío askenazí. Llegó a Israel buscando la estabilidad económica que su país de nacimiento le negaba, no por cuestiones religiosas ya que, al igual que Sarah, no es practicante. Tiene un carácter irónico e insolente cuando la ocasión lo merece, en particular cuando mantiene alguna discrepancia con el comisario Samuel Goldiak, donde saca a pasear su intelecto y sus dotes de observación. Pero lo más llamativo de su personalidad es su sentido del humor como herramienta curativa que le permite darle la vuelta a las situaciones en las que se ve envuelto como consecuencia de su trabajo.

Samuel Goldiak, comisario de policía y superior de Sarah Toledano y Lautaro Heller. Su gran seguridad en si mismo viene avalada por sus años de lucha en primera línea. Se jacta de que nunca le ha temblado el pulso, por su falta de escrúpulos. De ideología sionista, es capaz de cualquier cosa por defender a su país y restar credibilidad al pueblo palestino:

“Si había aprendido algo en todos estos años de servicio era que la guerra de información, cuyo anhelo máximo era alcanzar la desinformación, resultaba tan importante como la lucha cuerpo a cuerpo; a veces incluso más. Por descontado, para lograr la deslegitimación del enemigo de cara a la opinión pública estaba permitida cualquier artimaña, incluyendo la de forjar el relato de los hechos a base de falsedades. La verdad era algo que carecía de interés; lo importante era conseguir la empatía de los medios de comunicación internacionales, aunque para ello hubiera que instrumentalizar a sus editorialistas”.

Me ha sorprendido la cantidad de diferencias existentes entre los judíos, dependiendo de su lugar de origen. Por ejemplo, el sargento Heller, que aunque llegó a Israel procedente de Argentina, su familia emigró a este país desde Centroeuropa, de ahí que sea considerado askenazí, rama ésta de gran relevancia en Israel al considerar que éstos fueron los fundadores del Estado de Israel y, por lo tanto, ostentaban los cargos de poder. O a la inspectora Toledano, de origen sefardí, como aquellos procedentes de la península ibérica. Por otro lado, están los ortodoxos, que abrazan el sionismo sin cuestionar las razones y se creen más judíos que nadie.

BOOKTRAILER DE LA COSECHA HUMANA:

CONCLUSIONES:

La cosecha humana es una novela adictiva, que te sorprenderá de la misma manera que te mantendrá en vilo desde la primera página. Cuajada de situaciones intensas donde los protagonistas se ven inmersos en todo tipo de peligros. En definitiva: un thriller y un fiel exponente de la novela negra que no te dejará indiferente.