EL BLOGUERO INVISIBLE - Crónica de una ilusión compartida

No ha pasado tanto tiempo desde que un 21 de diciembre se me ocurrió la idea (contagiada ya por el virus de la Navidad) de plantearos esta iniciativa, no pensé, en ningún momento, que este proyecto que se nacía desde la humildad alcanzase la relevancia que ha tenido. Y digo relevancia porque en much@s de nosotr@s ha provocado una oleada de sensaciones y nos hemos vuelto a entusiasmar con algo tan sencillo como regalar un libro. Al principio fue un simple esbozo, que sólo dependía de que vosotr@s os sumáseis a él. Nada más publicar este deseo, llegó el primer comentario, el banderín de salida de una nueva experiencia virtual:

LAKY dijo...

Cuenta conmigo. Pienso qué libro regalar y a la noche o mañana redacto el post y me apunto definitivamente.
Muy buena idea!

Poco a poco os fuísteis incorporando l@s demás, con vuestras sugerencias, con vuestro apoyo a la idea, definiendo, en definitiva, las pautas para que este propósito se materializase. Se modificaron algunos requisitos, porque desde el principio, esta idea era de tod@s y tod@s queríamos que saliese bien.

A estas alturas, cuando la mayoría de vosotr@s ha volcado sus impresiones, y he podido comprobar que todo ha salido bien (bueno, creo que Carmen todavía no ha recibido su libro, pero todo se andará) me han quedado claras varias cosas: una, posiblemente la más importante, es que en la blogosfera se pueden llevar a cabo todo tipo de actividades, incluidas aquellas que implican afecto y ternura. Porque la red, durante unos días, ha servido para que un grupo de personas con una afición común, se quisieran convertir en amigos reales, regalando una parte importante de sus vidas: un libro que daba igual que fuese nuevo o usado, porque eso no era lo esencial, sino el cariño con el que iba envuelto y el deseo de agradar al receptor del obsequio. Y dos, que nos hemos divertido, mucho, sobre todo al cotejar como se iban cruzando los libros. En este sentido, cuando Espe, de la Taberna Libraria, escribió el primer post tras recibir su libro, no pude evitar reirme con ella, pero también emocionarme. Se percibía en sus palabras la implicación que, en mayor o menor medida, tod@s habíamos puesto en el tema y no se percató que al contar dónde había enviado su regalo, la receptora del mismo aún podía no haberlo recibido. Pero todo eso daba igual, porque la aludida sentía esa misma ilusión que todos presumíamos esperando un regalo especial. Su “post” fue una fiesta, en la que muchos participamos.

Y Espe se convirtió en el origen de otros muchos “post” que han venido a corroborar este anhelo compartido con el mismo denominador común: Por ejemplo, Laky, que tenía su entrada programada, se lío porque los nervios le jugaron una mala pasada, publicando antes de tiempo (como diría un neófito en estos asuntos, son las cosas del progreso, que también tiene sus fallos, porque no es preciso). Pero eso es lo menos relevante; lo verdaderamente importante se traduce en sus palabras, cuando nos explica que se siente afortunada por los libros recibidos. En su caso, como en el de otr@s muchas, recibió dos libros: Eva desnuda, de Julia Montejo y El día que fuimos dioses, de Francisco Rodríguez Tejedor. Ambos enviados directamente por sus autores y “debidamente” dedicados. Y al hilo de esto no puedo evitar mencionar a los autores que se han volcado, y mucho, sumándose a este idea y ofreciendo sus novelas con la mejor de sus sonrisas. Ha sido emocionante compartir con ellos, a través de correos electrónicos -en la mayoría de los casos- esta misma ilusión, la cercanía y el afecto que nos han demostrado, aunque yo fuese el único nexo de unión entre bloguer@s y escritores, que más tarde se ha materializado al dedicaros cada ejemplar. Y por esta razón, much@s de vosotros habéis recibido DOS ejemplares, ya que aunque algunos escritores participaban del juego de la misma manera que vosotros, otros “donaban” su obra sin más.

Y en este sentido quiero mencionar a Pilar Muñoz, la autora del libro de relatos Ellas también viven, que ha participado desde el primer momento, que ha animado como nadie y me ha facilitado la tarea con su empeño, su esfuerzo y su sentido del humor. Desde aquí quiero expresar mi respeto y admiración por esta mujer tan especial y darle las gracias por el cuento que ha publicado con motivo de esta iniciativa. Os invito a leerlo, porque es maravilloso. Nos habla de ilusiones renovadas, que es, en síntesis, lo que hemos experimentado durante estos días. También nos explica a quienes fueron a parar sus tres libros dedicados: Offuscatio, Almu e Icíar y el entusiasmo que puso en ello. Termina dando las gracias a sus “bloguer@s invisibles”, con la misma calidez de la que hace gala en su texto: Ángela, Carla y el escritor Antonio Medina, por los tres libros enviados, el último de ellos dedicado por el autor.

¿Y qué deciros de Carmina? ¡Mujer de poca fe! Que trabajito me dió con la excusa de que no tenía tiempo… Much@s pensáis que el verdadero trabajo que esta iniciativa suponía consistía en cómo realizar el cruce de libros, porque en algunos casos much@s de vosotros teníais demasiados libros de los que aparecían en la lista de participantes. Vale, es verdad que tuvo su enjundia el tema, pero nada que ver con convencer a esta mujer para que participase, sabiendo de antemano que iba a disfrutar con el resultado… y ahí la tenéis, comentando en su post que se encuentra más feliz que una perdiz con sus dos libros: La conjura de los necios, de John Kennedy Toole y El eterno olvido, de Enrique Osuna (dedicado, como a ella le gustan) y una carta de Margaramon que le llegó al corazón.

He disfrutado también (bueno, para ser exacta, estoy disfrutando con tod@s) leyendo la entrada de Tatty; en particular, cuando nos comenta que tras una semana de nervios, la experiencia ha resultado maravillosa. El día anterior a su escrito pudo ¡por fin! recoger su paquete en Correos. Se trataba del libro Cera de Babilonia, enviado (con una bonita dedicatoria) directamente por su autor, Salvador Ortiz Serradilla. Pero también nos habla del cariño que puso al envolver en papel de regalo, adjuntando unos detallitos, el libro que ella ofrecía ¿habrá llegado a su destino?.

Cartafol en su blog nos habla de ilusiones: la de envolver el libro con esmero, contando con la colaboración de una amiga y presentarse en la oficina de Correos el día indicado, dispuesta a que otr@ bloguera de la capital de España recibiese el suyo, con el mismo anhelo con el que ella ha recibido el que la que os escribe ha enviado y que le servirá para poder cumplir el desafío de Laky.

No he podido evitar reirme con Pedro al leer sus impresiones. No sé qué parte de verdad hay en la incertidumbre que plasma en su escrito, o si sólo es un pretexto para hacernos partícipes de la inmensa alegría que ha sentido al recibir un ejemplar dedicado por parte de Inma Chacón, la flamante finalista de la última edición del Premio Planeta. El caso es que Tiempo de arena duerme en su casa y el próximo lunes será la envidia de sus compañeros de trabajo.

Matiba nos relata que gracias al Bloguero invisible ha descubierto el blog de Offuscatio, la persona que se ha ocupado de que Cartas a Samuel, de Daniel Gottlieb se encuentre desde el día 3 de enero en su domicilio; además, le ha dado la oportunidad de compartir no sólo su afición por la literatura, sino su amor por Portugal. Pero también se ha encontrado con otra sorpresa añadida: un día después halló un nuevo libro en su buzón; en este caso, Piezas desequilibradas, de Darío Vilas, dedicado por el autor.

Almu consiguió emocionarme con su tierna prosa. En su entrada explica cómo conoció esta historia, como se hizo un hueco y como se sumó porque la idea le pareció divertida e ingeniosa, participando con un libro al que tiene especial cariño. Todavía no sabe a qué bloguera iba dirigido, porque sólo conoce sus datos postales... ¿Habrá que esperar a que Eterna Lolita se ponga las pilas y nos lo cuente?. También nos habla de los nervios que pasó esperando su regalo, hasta que llegó el ansiado aviso de Correos y pudo comprobar que la remitente ha sido precisamente la escritora Pilar Muñoz, quien se lo ha dedicado, además de adjuntar un precioso marcapáginas. 

Margaramon comenta en su blog que se sumó a este lío con alguna reticencia. En un principio, se excusó con que no tenía tiempo, pero la realidad era que temía no poder enviar su libro en la fecha establecida y perjudicar de esa manera al receptor del libro, a lo que se unía que vivir en Mallorca también tiene sus desventajas, como que no siempre llegan las cosas cuando uno desea. Y lo que es la vida: por lo que he leído estos días, su regalo -que preparó con la mayor ilusión del mundo- fue el primero en llegar (¡Para que desconfiéis de Correos!). También nos dice como se enteró de cual iba a ser su regalo, como he explicado al hablar del post de Espe. Pero eso era lo de menos, y lo constata explicándonos que fue a Correos ilusionada, emocionada y con una sonrisa de oreja a oreja, que todavía no ha perdido ya que tiene en su poder La misteriosa llama de la reina Loana de Umberto Eco y un precioso marcapáginas artesanal, realizado con todo el cariño del mundo por Espe.


Ángela nos cuenta en su blog que lo suyo no son las reseñas, pero que ha disfrutado mucho con Isla de Nam, el libro con el que ha sido obsequiada por parte de Pilar Alberdi. Pero tanto o más disfrutó preparando su paquetito, el que iba a enviar a una desconocida (ahora no tanto), como si se tratase de  uno mas de su la familia. Por mi parte, agradezco a esta bloguera sus impresiones sobre la novela, pero creo que como a Carmen, a algún autor se le ha ido el santo al cielo (o bien los carteros se tomaron vacaciones adelantadas), pues le tiene que llegar otro libro más ¿nos lo contará cuando eso ocurra? (1)

Si hay alguien que puede decir que participar en El bloguero invisible no ha sido un camino de rosas, esta es, sin lugar a dudas, Meg. No os podéis imaginar el agobio que me entró el día que habíamos fijado para enviar los libros y de pronto me encuentro un e-mail suyo en el que me dice que tiene problemas, ya que su libro tenía que viajar a las islas afortunadas. Lo resolvimos como pudimos (querer es poder, dicen por ahí), pero de eso y de lo mucho que ha disfrutado, poniendo todo el empeño del mundo, podéis enteraros leyendo su post. Yo, por mi parte, me alegro un montón de que el escritor Antonio Medina Guevara le haya regalado un ejemplar de su novela Una mujer llamada Muerte.

Y al hilo de las visicitudes que nos contó Meg, tenemos la explicación que Carla nos da en su blog. Para empezar, a pesar de los contratiempos surgidos al tener su residencia en Canarias, su paquete llegó a tiempo, incluso un día antes de lo esperado. El contenido del paquete le hizo mucha ilusión, no sólo porque el libro le pareciese genial y de su gusto, sino porque iba acompañado de un broche, un puñado de marcapáginas, dos calendarios, un imán de la película de Tintín y una postal. Por su parte, su envío también llegó a tiempo a su ahora "Bloguera visible", Pilar Muñoz.

Por mi parte, mi "bloguera ahora visible" fue Laky. Aunque os parezca mentira, aún sabiendo de antemano que libro iba a recibir y de quien, sentí los mismos nervios e ilusión durante la espera que cualquiera de vosotr@s. Cuando el libro llegó a mi casa, un torbellino de sensaciones se apoderaron de mi. Su regalo iba acompañado de varios marcapáginas, el primer capítulo en forma de librito de "El nombre del viento" y una nota que, al estar dirigida exclusivamente a mi, me niego a compartir. 

(1) Efectivamente, Ángela me confirma, a través de un comentario, que le ha llegado otro libro, esta vez se lo ha hecho llegar el escritor Eloy Moreno y se trata de El bolígrafo de gel verde.

(Estos son los post que, hasta ahora mismo, se han ido publicando. Pero no dudéis en que comentaré los que de ahora en adelante se vayan sucediendo).

En definitiva, sólo me queda agradeceros vuestra participación, esperando volver a repetir ¿Puedo contar de nuevo con vosotr@s?